Planta de tratamiento de aguas residuales de Lausana
Solución de iluminación industrial LED mejora el rendimiento del lugar de trabajo y reduce costes operativos
La planta de tratamiento de aguas residuales de Lausana-Vidy trata las aguas residuales de la ciudad de Lausana y de otros quince municipios vecinos. Con sus 64.000 m², es uno de los últimos emplazamientos industriales a gran escala situados junto a un centro urbano.
Originalmente construida en los años 60, la planta se sometió a una importante renovación en los últimos años para cumplir con las actuales leyes de protección medioambiental y adaptarse a la demanda de una población que no para de crecer.
EPURA, la empresa responsable de la gestión de la planta en nombre de la ciudad, instaló las tecnologías más recientes para tratar las aguas residuales, microcontaminantes y lodos de depuradora para, en definitiva, mejorar la calidad del agua para la región que rodea el lago de Ginebra.
Conscientes de su huella ecológica, la empresa decidió también sustituir la iluminación de la planta para reducir el consumo energético y garantizar unas condiciones de trabajo seguras.
Iluminación para el ahorro
Una solución de iluminación LED fue la elección obvia por tres razones:
- reducir el coste energético y las emisiones de CO2;
- garantizar una iluminación más clara y uniforme para mejorar las condiciones de trabajo;
- reducir las operaciones de mantenimiento.
Para iluminar todo el centro, se instalaron en total 865 INDU LINE 3 Gen 2 y 50 INDU FLOOD.
Aumento del rendimiento
INDU LINE emite una nítida luz blanca que mejora la visibilidad y el confort visual en toda la instalación. Gracias a su elevado CRI, los empleados pueden inspeccionar fácilmente el agua para detectar condiciones sépticas y distinguir los colores en los motores de las bombas y otras máquinas. La mejora en las condiciones de trabajo ha contribuido a optimizar la productividad de los empleados.
Reducción del mantenimiento
Las antiguas lámparas de descarga tradicionales costaban a la planta dinero y un valioso tiempo de mano de obra cada vez que había que cambiar las bombillas. Gracias al robusto diseño y larga vida útil de los LED, las operaciones de mantenimiento y sus costes asociados se han reducido para muchos años venideros.
La nueva iluminación va acorde con los esfuerzos de la empresa por reducir el impacto medioambiental y fomentar un uso más responsable de la energía, velando a la vez por la salud y la seguridad en el lugar de trabajo.